Creación literaria

"La escritura es la pintura de la voz"  Voltaire

Como dijo este filósofo y escritor francés, la escritura es la manera que tenemos los seres humanos de reflejar de forma física nuestra voz y para ello, como todo buen pintor, hay que entrenarse para poder hacerlo bien.

Como docentes nos debemos de asegurar que esto comience a desarrollarse desde la infancia y que por lo tanto los niños cojan gusto por escribir y además de manera correcta. 

Es por ello que a continuación veréis tres manera de fomentar la escritura en la educación primaria, pero no de cualquier manera sino en prosa, en verso y un texto dramático. 

Las tres actividades y sus textos que veréis a continuación van enfocados a niños de la edad de 9/10 años o lo que equivale a cuarto de primaria ya que es el curso con el que he estado uno de los dos meses de prácticas y con el que me siento con más confianza para llevar a cabo esta actividad. 

También he escogido esta edad porque como podréis ver a continuación, el tipo de actividades escogidas, por el tipo de palabras que se van a utilizar y pensar para la poesía, la capacidad de poder escribir un cuento mínimamente largo y con sentido y por el hecho de ser capaces de memorizar y aprenderse bien una pequeña obra de teatro con la organización de toda la clase, requiere del desarrollo cognitivo donde se encuentran los chicos de la edad o curso escogido. 

La poesía

Para este tipo de escritura he decidido escoger el procedimiento o método al que llamaríamos greguerías que consiste en escribir utilizando la metáfora. 

Para que los niños puedan practicarlo con algo de soltura conviene haber visto con anterioridad el sentido y funcionamiento de la comparación ya que la metáfora es básicamente lo mismo pero eliminando el "como". 

Aún así, para que se sientan más cómodos comenzaría yo con un ejemplo y cuando ya entendiesen bien de que se trata, construiría una poesía o cadena de metáforas yendo niño a niño y recogiendo así una por alumno de la clase. 

Después de esto realizarían una individualmente sobre un tema que ellos elijan, como la que veréis a continuación: 

La clase zoo sin desfases

contiene muchos animales.

Los libros son aves singulares ,

las mesas dragones de cuatro dientes

y los percheros cabezas de lagartijas .

Las sillas son jirafas sin pendientes,

la pizarra es el mar de muchas especies

y las ventanas los ojos de avestruces.

Así el aula es nuestro mundo

y nuestro secreto mejor guardado . 

La prosa

En cuanto a la prosa he escogido la opción de reescribir un cuento. ¿Quién no ha querido alguna vez reescribir una historia a su forma y parecer? 

Bien esto para realizarlo con los niños está muy bien porque ya tienen la historia y las ideas principales, lo que deben de hacer a continuación es utilizar su imaginación y cambiarla a su gusto, añadiendo o cambiando personajes, haciendo del malo el bueno o travesuras por el estilo. 

En mi caso he escogido Blancanieves y lo he convertido en libro con manualidades que encontré por mi clase durante las prácticas. A continuación podéis ver el proceso de realización y leer el cuento. 

Como resulta un poco complicado leer el texto en las imágenes y por ello os lo pongo a continuación.

Erase una vez una princesa que vivía en un castillo en un mundo en el que siempre era primavera.

La princesa era conocida por ser muy buena y amable, no como su madrastra, que se la conocía en el reino por su mal genio.

Un día la princesa decidió escaparse del castillo por razones desconocidas, aunque sabiendo cómo era la madrastra, lo más probable es que fuese debido a una discusión con ella.

Caminando pues por el bosque, llegó la princesa a una casita muy bonita, aunque algo pequeña. Decidió entrar y como estaba muy cansada decidió echarse una siesta. Así horas más tarde se despertó rodeada de pequeños hombrecitos que la miraban asombrados, eran 7 de ellos para ser exactos.

La princesa, tan amable ella, convenció a los enanitos para que la dejasen vivir con ellos a cambio de algo de ayuda en la casa y fue así como comenzó una vida con ellos. Pero no todo era perfecto ya que al cabo de un tiempo, los enanitos se dieron cuenta de que desde que llegó la princesa siempre, al acabar la cena, tenían un dolor de tripa muy raro y que habían encogido ligeramente en tamaño. A pesar de esto, no le dieron importancia ya que estaba todo muy rico y supusieron que era por trabajar tanto últimamente en las minas.

Pensar eso fue un gran error, pasados varios meses se hicieron tan pequeños que desaparecieron, pero no solo eso, en el reino comenzaron a notarse algunas ráfagas de viento algo más frescas de lo común. Fue entonces cuando la madrastra decidió tomar cartas en el asunto y salir definitivamente en busca y captura de la princesa, ya que sus verdaderas intenciones eran acabar con la magia que había en el reino, basada en una primavera eterna gracias a la presencia de enanitos en él. Por ello, la princesa quería eliminar a los enanitos, porque así conseguiría el trono y estar sumida en un invierno gélido, que era lo que a ella más le gustaba.

Cuando la madrastra por fin encontró a la princesa, ésta ya estaba viviendo en la casa de sus siguientes pequeñas víctimas. De manera que se organizó para ir a visitar a la princesa mientras los enanitos no estuviesen en casa y así, disfrazada de ancianita, se acercó y llamó a la puerta, acto seguido la madrastra le ofreció un pastel de manzana preguntándole a la princesa si deseaba compartirlo para merendar ya que le pesaba mucho en la cesta y sino el camino de vuelta a casa se le haría un poco duro.

Consiguió así la madrastra que la princesa cayese en un sueño muy profundo debido a su pastel hechizado y llevársela al medio del reino para que todos los habitantes pudiesen ver lo que ésta estaba tramando.

Explicada la situación muy detalladamente, cuando la princesa despertó, todos los habitantes estaban contra y ella entendieron pues que estaban muy equivocados en cuanto a ella y que en realidad la madrastra solía estar siempre de mal humor porque la princesa era muy maleducada y perversa y ésta sólo intentaba ayudarla para que cambiase de parecer e hiciese el bien por y para su reino.

El castigo que decidieron imponer a la princesa fue el de desterrarla al desierto de hielo, habitado sólo por la blanca nieve, a meses y meses andando desde el reino.

Fue así como pasó a la historia la princesa Blancanieves y amada la madrastra. 

Texto dramático - Adaptar una obra

El teatro o texto dramático es algo que se tiene un poco olvidado o abandonado en la escuela y supongo que será porque no es un texto para ser leído sino para ser representado. Pero no por esto debe de dejarse a un lado ya que es un recurso muy bueno para que los niños aprendan a escribir y comiencen a diferenciar que según la situación, el porque o el para quien escriban, la forma cambiará. 

No solo es una manera de fomentar la escritura en los niños sino también aspectos tan importantes como el trabajo en equipo, el respeto o la oportunidad de luchar contra la timidez. 

En este caso he decidido realizar la obra a partir del cuento reescrito que habéis podido leer anteriormente. 

Como no hay muchos personajes, la clase se puede dividir en dos y así todos pueden participar en algo y también para ayudar a sus compañeros a ver en qué podrían mejorar, o qué es lo que más les ha gustado.

Podéis leer la obra a continuación: 

PERSONAJES: la princesa, la madrastra, los siete enanitos y los habitantes del reino. 

- NARRADOR: Erase una vez una princesa que vivía en un castillo en un mundo en el que siempre era primavera. La princesa era conocida por ser muy buena y amable, no como su madrastra, que se la conocía en el reino por su mal genio.

- MADRASTRA: princesa te he dicho que tienes terminantemente prohibido salir del castillo.

- PRINCESA: tú no eres mi madre y no me puedes manda además no voy a salir para nada malo, sólo para tomar algo de aire fresco y jugar con los animalitos del reino.

- MADRASTRA: yo sé perfectamente cuáles son tus intenciones fuera de los muros del castillo y te vuelvo a repetir que si sales tendrás muy malas consecuencias.

- Princesa: ¡eres malvada! ¡no te necesito!

-NARRADOR: así, tras esta discusión, una de las miles que solían tener, la princesa se escapó esa misma noche.

- PRINCESA (pensando en alto): por fin voy a poder ser feliz sin que la mala de mi madrastra mi prohíba hacer todo. Yo tan solo quiero cambiar mi reino y que sea muchísimo más bonito de lo que es ahora.

- NARRADOR: Caminando pues por el bosque, llegó la princesa a una casita muy bonita, aunque algo pequeña. Decidió entrar y como estaba muy cansada decidió echarse una siesta. Así horas más tarde se despertó rodeada de pequeños hombrecitos que la miraban asombrados, eran 7 de ellos para ser exactos.

- ENANITO 3: ¿tú quién eres y por qué estás en mi cama?

- Princesa: hola, soy una aldeana de un pueblecito del este del reino y estoy de camino hacia el oeste para visitar a un amigo pero aún me queda mucho camino y sin ninguna maldad decidí echarme una siesta.

- ENANITO 7: si te queda mucho camino te puedes quedar hoy a cenar y mañana por la mañana seguirás.

- PRINCESA: la verdad es que no tengo mucha prisa por ir llegar a mi destino y me gustaría conoceros más ya que parecéis todos muy majos, ¿qué tal si me quedo por un tiempo y hago las labores de la casa y os cocino?

- ENANITO 3: vale nos parece un buen trato así que bienvenida a nuestra humilde casa.

- NARRADOR: así es como la princesa se quedó viviendo por un tiempo con los enanitos aunque estos comenzaron a encoger de tamaño misteriosamente y a tener extraños dolores de tripa al acabar siempre de cenar aunque no le dieron importancia, error grande ya que semanas después, de lo pequeños que se hicieron desaparecieron.

Desde entonces comenzaron a notarse ráfagas de aire frío en el reino y fue cuando la madrastra decidió ir a por la princesa.

- MADRASTRA (pensando en alto): esta niña ya ha hecho demasiado, no voy a permitir que destruya nuestro reino ni que nadie más se vea afectado por sus ideas.

- NARRADOR: cuando la madrastra llegó a la nueva casa de enanitos en la que la princesa se había instalado, decidió comenzar su plan. 

(Llama a la puerta)

- PRINCESA: hola buenas, ¿qué desea?

- MADRASTRA (disfrazada): buenas joven, mira estaba de camino a mi casa y la verdad es que me pesa mucho la cesa porque cargo con un pastel que no me voy a comer entero y me preguntaba si te gustaría que nos lo tomásemos juntas y así al menos lo disfruto con alguien. 

- PRINCESA: oh que amable, ¡por su puesto! Pase por favor.

- MADRASTRA: gracias mujer

- NARRADOR: pasados unos minutos ya la princesa con la tarta en el estomago, se derrumbó en el suelo. La madrastra la cogió y la llevó al medio del reino, donde muchos ciudadanos se cruzaban.

- MADRASTRA: queridos aldeanos del reino primavera,  aquí os presento a vuestra princesa, la cual os ha tenido engañados toda la vida. Es una chica con ideas descabelladas y lo habéis podido notar en los últimos días en los que la brisa fría ha abundado y es porque sus intenciones eran las de eliminar a los enanitos para hacerse con el poder en un reino cubierto por el frío. 

- HABITANTE 1: no puede ser lo que dices, si la princesa es alguien muy buena.

- MADRASTRA: puedes ir a la casa de los enanitos Cuchuflitos y comprobar por ti mismo que no hay rastro de ellos. 

- HABITANTE 2: lo que dice es verdad, yo vivo al dado de ellos y hace tiempo que no les veo ni les oigo cantar. 

(La princesa se despierta)

- PRINCESA: ¿qué ha pasado? ¿dónde estoy?

- HABITANTE 1: lo que pasa es que gracias a la madrastra hemos descubierto tu perverso plan y que sepas que no te va a funcionar

- HABITANTE 2: exacto, porque hemos decidido que vas a ser desterrada al desierto blanco de nieve hechizada donde en realidad hace mucho calor

- PRINCESA: ¡no por favor! No me mandéis al calor, es lo que mas odio en el mundo.

- MADRASTRA: merecido lo tiene por haber intentado acabar con la primavera y con la felicidad de todo el reino

- NARRADOR: así es como la madrastra, con un conjuro mandó a la princesa al desierto de la nieve hechizada quien pasó a conocerse como Blancanieves y momento también en el que la madrastra fue amada por todo el reino, viviendo todos felices y en primavera. 

Conclusión personal

Puede ser que otras áreas de la asignatura de lengua no me gustasen cuando estaba en el colegio, no me gustaba ni leer porque siempre era obligado y libros que no me llamaban nada la atención, pero el aspecto de la escritura sí me gustaba algo más a pesar de que tampoco lo enseñasen adecuadamente. 

Escribir es un arte y debemos de intentar educarlo y desarrollarlo en los niños lo mejor que podamos ya que es un modo de expresarse y de dejar huella de manera muy personal ya que no hay dos personas en el mundo que se expresen igual. 

Esta última entrada ha hecho que me dé cuenta de lo poco que han trabajado conmigo la escritura en la educación primaria ya que ni poesía ni teatro era algo que se le dedicase mucho tiempo, a lo mejor pensaban que era "demasiado difícil" para nosotros o simplemente preferían dedicar tiempo a otros asuntos que para ellos sería más importante. 

Nunca en mi vida había escrito un texto dramático hasta ahora y la verdad es que aunque no sea lo mejor del mundo, creo que es algo que se debe de realizar con los niños en el aula ya que se pueden trabajar muchísimos aspectos aparte del de la escritura como son la expresión corporal, la imaginación y creatividad, valores como el respeto, es saber escuchar, el ser críticos y el regalo de vivir un momento distendido y divertido  con todos los compañeros. 

Pienso que como futuros profesores, aunque algo no lo hayamos hecho nunca antes porque pensemos que se nos da mal o porque no nos atrevemos a llevarlo al aula, debemos de al menos intentarlo y seguro que nos sorprenderemos de los resultados o si no, habremos aprendido de nosotros mismos y de algo nuevo. 

La escritura es algo esencial en el ser humano y por ello debemos de presentárselo a los niños con un arte y un don que tienen y que cada vez que cogen un lápiz o un boli es para crear algo jamás escrito. 

Los niños tienen la magia en sus manos ¿les ayudamos a descubrirla?

Bibliografía

Apuntes aportados por la profesora de literatura de 3º de Primaria, Irune Labajo